En el coche con nuestro perro

A la hora de escoger un coche, igual que tenemos en cuenta si hay niños en la familia hay que incluir entre las variantes si tenemos un perro que va a viajar en él.

La seguridad de nuestro perro es nuestra propia seguridad. Un perro mal asegurado en un vehículo puede ocasionar un accidente o convertirse en un proyectil en una frenada brusca.

Igual que nuestros hijos tienen un lugar y una forma de asegurarse nuestros perros deben tener su propio espacio y cinturón de seguridad.

Separación entre asientos y maletero

Si tenemos perro o pensamos tenerlo y vamos a comprarnos un coche, lo ideal es contar con un maletero abierto que tenga instalado un sistema de separación entre él y la parte de los pasajeros, para que nuestro perro no pueda acceder desde el maletero a los asientos.

En el caso de que nuestro nuevo compañero peludo llegue a nuestra familia cuando ya tenemos un coche es la hora de escoger la mejor manera de instalar una red de seguridad u otro tipo de barrera.

Espacio para moverse

Aunque nuestro perro viaje en el maletero deberemos asegurarle convenientemente para que no salga despedido en cualquier frenazo o accidente. Podemos instalarle en un transportín, una jaula o asegurarle con un cinto al coche.

No olvidemos que deberemos dejarle espacio suficiente para que pueda estar sentado o tumbado, ya que no hay nada peor que obligarlo a estar todo el tiempo en la misma posición sin poder moverse.

En la zona de asientos siempre atado

Si nuestro coche no dispone de maletero abierto, nuestro perro deberá viajar con nosotros en la zona de asientos. Es muy importante dejar claro que no podemos viajar con él a nuestro pies sin llevarlo anclado. Aparte de incumplir una normativa de tráfico estaremos poniendo en peligro a todos los pasajeros.

La forma segura de viajar con nuestro perro es asegurarle a uno de los cinturones de seguridad. Se puede hacer fácilmente utilizando una correa de extensión adaptable que tiene un gancho en un extremo y un anclaje de cinturón de seguridad en el otro. Este extremo encaja a la perfección en los dispositivos de los coches.

Arnés y cinturón, lo más seguro

El extremo del gancho deberá sujetar al perro a través de un arnés. Es muy importante no sujetarlo al collar, ya que en caso de que tengamos algún susto toda la fuerza de la frenada se aplicará en su cuello y le podría ocasionar lesiones graves.

Recordad: arnés + cinturón de seguridad siempre.