Cuando estamos intentando que nuestro perro aprenda conductas adecuadas, siempre que lo hacen bien o atienden nuestras órdenes, debemos recompensar esa obediencia. Una buena manera de premiar sus buenas acciones puede ser que le demos una galleta. Como a muchos de nosotros, a los perros también les encantan esas comidas prohibidas en una dieta. Por eso, es importante que si ellos cumplen, nosotros también le demos un “dulce” momento.
Existen en el mercado muchas variedades de galletas para perros, que les gustan muchísimo. En vez de comprarlas, si os animáis, podéis hacerlas vosotros mismos. No tendrás ningún problema si eres un poco cocinillas y le pones el ingrediente secreto: mucho cariño. Las cosas que se hacen con mimo siempre salen mucho mejor que las que se hacen con desgana.
Cualquier persona que conozca un poco a los perros sabe que hay algunos alimentos que son verdaderamente tóxicos para ellos. Para aquellos que no los conozcan, algunos de estos son: chocolate, uvas, azúcar, harinas blancas, café o sustancias que contengan cafeína.
Ingredientes para elaborarlas
– Un cuenquito de hígado crudo que podemos sustituirlo por jamón, pollo hervido, carne asada o atún.
– Un cuenquito de harina integral o de linaza.
– Un cuarto de taza de aceite de linaza.
– Un cuarto de taza de leche de almendras.
¿Cómo las hacemos?
Lo primero que debemos hacer es lavar bien el hígado y escurrirlo con cuidado. Después lo trituraremos con ayuda de una batidora o una licuadora y lo pondremos en un recipiente. Es entonces cuando añadiremos los demás ingredientes: la harina integral o de linaza, el aceite y la leche de almendras.
Cuando tengamos todos esos ingredientes en el recipiente con el hígado, los mezclaremos bien hasta que logremos conseguir una masa homogénea que se parezca a un puré. Cuando lo hayamos logrado, taparemos el recipiente y lo meteremos en el frigorífico durante al menos una hora.
Una vez haya pasado ese tiempo, la aplanaremos encima de una tabla y la cubriremos con film transparente. Con ayuda de unos moldes puedes ir dando formas a tus galletas y quitando el sobrante de masa. Cuando ya las tengamos preparadas, colocaremos papel de horno en la bandeja para que no se nos peguen.
Es muy importante que antes de introducir la bandeja en el horno lo precalentemos. Cuando haya alcanzado los 180 grados, introduciremos las galletas para nuestro perro en el horno durante 15 minutos. Después, de ese tiempo, las dejaremos dentro hasta que se enfríen durante unos 45 minutos. Pasado ese tiempo, nuestra mascota podrá degustarlas sin problema.