La conjuntivitis es una de las enfermedades más comunes tanto en perros como en gatos. Consiste en una infección de la conjuntiva, la membrana que recubre la parte interna del párpado.
Es muy fácil saber cuándo nuestro peludo tienen conjuntivitis porque la parte blanca del ojo estará muy enrojecida y el ojo llorará. Tendrá también muchas legañas, que pueden ser en ocasiones amarillas o verdosas. En algunos casos las legañas pueden hacer que se les peguen los párpados, sobre todo tras dormir, por lo que es importante lavarles bien los ojos con un suero.
A pesar de que en muchos sitios se recomienda la manzanilla, al igual que sucede con las personas el suero es mucho más eficaz y limpiará de forma más efectiva los ojos, arrastrando toda la porquería que supuran debido a la infección.
Causas de la conjuntivitis
La conjuntivitis puede estar causada por muchos factores, como un virus, un hongo o una bacteria. No hay que dejar que pase desapercibida porque a veces la conjuntivitis puede ser el primer signo de otra enfermedad muy seria. Si tras lavar los ojos con suero tres veces al día durante un par de días tu animal no mejora llévalo al veterinario para que lo revise, descarte males mayores y te recete un colirio adecuado.
Puede ser muy contagiosa, sobre todo por contacto, así que es preferible evitar que el animal esté en contacto con otras mascotas pero no te preocupes por ti o por tu familia porque la conjuntivitis humana y la felina y la canina son diferentes. Ni tu mascota te contagiará a ti ni tú les contagiarás a ellos tu conjuntivitis en caso de padecerla.
Prevención
Algunos perros y gatos por su raza o características son más propensos a estas infecciones de la membrana conjuntiva. Procura mantener limpios sus ojos para evitar que estén incómodos y se acumulen porquerías. En el caso de los perros no es bueno dejar que viajen con la cabeza asomada por la ventanilla del coche. Además de ser peligroso es fácil que les entren en los ojos restos de piedras o polvo que los neumáticos levantan al girar.
Cada cierto tiempo revisa los ojos de tus mascotas para comprobar que no hay nada anormal en ellos y que su visión es correcta. Detectar los problemas a tiempo evita que lo que puede ser un problema leve derive en asuntos más serios.