Castración en los animales

Cuando se habla de castración hay mucha gente que lo ve como una barbaridad que se le hace al animal, pero en muchas ocasiones se habla desde la ignoracia o la virilidad masculina y no profundiza en el tema. La crisis no solo afecta a los humanos sino que a los animales también porque son los primeros que salen de casa cuando no hay dinero para mantener a la familia. La consecuencia que queden abandonados en cualquier lugar a su suerte o que se les lleve a una protectora que no siempre les pueden salvar. Para evitar estas situaciones uno de las reflexiones que debería hacer el ser humano, es que los animales de compañía deberían estar castrados para evitar la procreación y así evitar multiplicar la población de mascotas. La gente muchas veces quiere  hacer negocio con el cruce de una determinada raza, pero no se dan cuenta que están aumentando el número de esas mascotas y en muchas ocasiones sin saber si las van a poder colocar.

La   castración es una  intervención quirúrgica para eliminar los órganos sexuales masculinos o femeninos con ello se elimina la producción de hormonas. En el caso de machos territoriales que llegan a la agresividad se puede eliminar totalmente por la desaparición de la testosterona y en el caso de la hembras se elimina el celo.

Hay muchos estereotipos en relación a la castración

Se les cambia el carácter:

No se les cambia, pueden ser modificadas conductas relacionadas con las hormonas, si tu perro es agresivo debido a la presencia de testosterona ésta desaparecerá pero por ejemplo si es un perro nervioso porque así es su carácter este no cambiará.

Disfrute sexual

Esta justificación se da sobre todo entre la población masculina, porque le vas a quitar los testículos sino va a poder disfrutar de las relaciones sexuales con la hembra. Los animales no disfrutan como los humanos de las relaciones sexuales, excepto algunos simios. Los animales tienen relaciones sexuales porque se lo dicta su instinto, un ejemplo de ello es que la hembra solo acepta al macho para la monta cuando esta se encuentra en celo, sino está en ese periodo no se lo va a permitir.

Si lo castro engorda

Un estereotipo más, los animales castrados engordarán si llevan una mala alimentación o si comen más de lo que desgastan independientemente que se les haya castrado o no.

Las hembras deberán reproducirse por lo menos una vez

Esto no es para nada cierto, como he dicho antes tienen relaciones sexuales por instinto, sino tiene el celo ella no tendrá la necesidad de procrear.three brothers 3

Niños que desean una mascota

 

 

A muchos niños les gustan los animales y les gustaría tener uno lo que tiene como consecuencia que taladren a sus padres con la petición de “quiero una mascota” pero hay que valorar en que condiciones se va a tener esa mascota, sí les preguntamos a los niños nos van a decir que sí se van a encargar de ella, y que ellos van a ser quien la cuiden pero que hay que ser realistas gran parte de las atenciones que necesite el animal se las va a tener que dar el adulto, aunque les enseñemos a colaborar.

Todos conocemos los beneficios que supone tener una mascota, como es el enseñar al niño responsabilidad, empatia, a mejorar su comunicación, a respetar tiempos… Son muchos los aprendizajes que puede llevar a cabo el niño pero siempre que se haga de forma responsable.

Lo primero que debemos hacer es valorar el tipo de mascota y los cuidados que necesite, para ser la primera mascota es mejor desechar la idea de tener reptiles  primero porque son poco afectuosos y porque algunos de ellos puede presentar algunas dificultades de manejo.  Las aves también deberiamos evitarlas porque la interacción no es excesiva. La primera mascota debería de ser un roedor(conejo, cobaya, hamster…) o gato o un perro.

Hay que establecer que puede y que no puede el niño hacer con respecto a la mascota, hay cosas que puede llevarlas a cabo al principio con ayuda y luego de forma autónoma, por ejemplo cepillarles, darles de comer, cambiarles el agua… estas tareas debemos establecerlas con el menor y dejarles claro que va a ser suya y que va a ser una tarea diaria.

Por otro lado nosotros como adultos también tenemos que tener claro que aquello que no van hacer nuestros hijos lo tenemos que hacer nosotros y que lo debemos llevar a cabo con responsabilidad, si nosotros no predicamos con el ejemplo es complicado que ellos hagan nada, lo que más enseña a un niño no es lo que le digamos sino lo que hagamos y si nuestros actos son pasar del animal nuestros hijos también lo harán.

Por eso es necesario que meditemos la situación y si es inviable tener una mascota porque nuestro tiempo es escaso es mejor que hablemos con el niño que se lo expliquemos, no vale el tajante NO porque el niño no parará de pedir una mascota es mejor sentarse con él y hacerle entender porque no se puede en ese momento.