Ya está el carnaval a la vuelta de la esquina, y como cualquier creador de contenidos que se precie de tal, periodista, político o profesional de la nada en general, tengo que aprovechar esta efeméride (como cualquier otra que aparezca en el horizonte calendaril) para hablar de lo que más nos gusta. De la combinación entre mascotas y carnaval sólo podía salir una cosa: mascotas disfrazadas.
Pocas cosas hay más típicas y tópicas que disfrazarse de animal. ¿Quién no ha sido alguna vez un perro, un gato, un gran felino, un gorila, una mariposa u otro insecto, algún pájaro…? ¿Y nuestros compañeros animales? Desde el amplio y maravilloso mundo del Do It Yourself (hazlo tú mismo) nos puede llegar, y de hecho han llegado desde siempre, cualquier disfraz alocado que la mente humana haya podido diseñar para sus animales. Aquí, el límite es el cielo.