Admito que cada animal tiene sus taras mentales, y yo no les quito el mérito, pero es verdad que muy pocos animales, tienen todas las taras del mundo, por no decir ninguno, ¿no?
Pues no, porque si yo os presentara a mi perra, os quedaríais anonadados de todas las cosas que se le ocurren a este cachorrito de… catorce años. Y tú te la imaginarás, triste y afligida, en un rincón todo el tiempo, no sé, algo mayor… perdona, pero no.
Cuando hay comida en juego
Ella tiene siempre hambre, será que el Alzhéimer le ha alcanzado y no se acuerda si ha comido o no, entonces es una bolita muy mona de lanita, ¡que te comería por los pies! Y es más, te lo dice, porque empieza a producir unos sonidos (no ladridos) que te presionan tanto que al final le tienes que dar, porque te mira con una carita…de desencajada, que no tenía bastante con Alzhéimer sino que también le da el Parkinson.
Yo fardo de ella, porque aparte del alzhéimer, tiene cataratas y no, no son ojos verdes, son dos cataratas, la de Niágara y la de Iguazú. Yo le tiro al aire a mi perra lo que sea (porque se come hasta la coliflor) , y no-toca-suelo. Eso sí, cuando la saco a que haga sus necesidades bien que me confunde con todo el mundo y tengo que llamarla porque si no se va con ellos.
Ella, se puede pasar un día perfectamente sin comer pienso, porque sabe, que al final alguien caerá rendido a sus encantos y cazará algo. Pero , si no lo consigue con esa técnica, la muy perra te hace ir a la cocina , te ladra o te va empujando, se pone delante del frigorífico, ¡y te empieza a hacer esos sonidos extraños para pedir comida!.
Ñam, ñam
Mi compañero de piso la tiene un poco mimada, y le da todo lo que ella le pide, y no os podéis imaginar cómo lo mira mi perra cuando lo ve. Es, como la Virgen del Pilar para ella. Así pasa, que sale corriendo detrás de él, cual cachorrillo longevo a cambio de algo de comer. Dolores ¿qué dolores?
Eso sí, mi perra cuando duerme, duerme como todos los perros, y ya puede caer un terremoto que la tengo que despertar antes yo a ella, porque si por ella fuera salvaría al frigorífico antes que a mí.