Desde el momento en el que decidimos tener un acuario, al igual que cualquier otra mascota, debemos acercarnos a una tienda de animales en la que los profesionales que en ella trabajan puedan aconsejarnos y orientarnos en nuestra elección. Es recomendable elegir el acuario más grande que podamos permitirnos, tanto económica como espacialmente, puesto que nuestros peces serán mucho mas felices con espacio suficiente para moverse y nos resultará mas sencillo controlar las variantes de temperatura, limpieza…
También es necesario decidir si queremos que nuestros peces sean de agua caliente o de agua fría. En este artículo vamos a hablar de algunas de las especies de peces de agua caliente más comunes en nuestros acuarios. Para ello nos vamos a centrar específicamente en los peces vivíparos. Todos ellos tienen una serie de características en común, entre ellas que son fáciles de mantener, de criar y son relativamente baratos. Es por ello por lo que son muy recomendables para los novatos en esta materia. Todos ellos son omnívoros y se adaptan muy bien al alimento en escamas y gránulos. Viven en agua moderadamente dura, con dH máximo de hasta 30º. Todos tienen crías aproximadamente una vez al mes, aunque tienden a devorarlas casi siempre. Para evitar esto mismo existe una especie de “trampas” para que los alevines permanezcan en ella y evitar así que entren los peces más grandes.
Una vez mencionadas estas características comunes entre ellos procederemos a establecer su clasificación. De este modo podemos distinguir entre los siguientes tipos:
- Guppys
Habita en aguas cuyas temperaturas oscilan entre 22 y 28º C, con pH entre 7 y 8,5. Puede llegar a medir como máximo 5 cm.
Diferenciamos perfectamente a los machos de las hembras ya que los primeros presentan aletas de mayor tamaño y son sumamente coloridos.
Es fácil de cuidar y se reproduce con muchísima frecuencia llegando a dar a luz hasta 40 alevines por mes, habiendo alcanzado su madurez a los 4 meses. Es por ello por lo que se ha convertido en el pez más popular en los acuarios.
- Platys
Suelen habitar en aguas con temperaturas que oscilan entre 20 y 27º C, con un pH entre 7 y 8. Necesitará alimento verde y alimento vivo. Puede llegar a alcanzar un tamaño máximo de 6 cm.
Podemos diferenciar al macho de la hembra por su pronunciado gonopodio (aleta anal modificada que pasa a formar parte del aparato reproductor) y porque esta última es bastante más corpulenta. Pueden gestar alrededor de 80 alevines durante aproximadamente un mes.
También se han convertido en peces muy populares debido a su fácil cuidado, su gran variedad de colores y a su gran adaptación al medio. Además se trata de un pez muy pacífico que convive perfectamente con el resto.
- Mollys
Provienen de aguas con temperaturas entre 18 y 30º C, con valores de pH entre 7 y 8,5. Al igual que el platy, necesitará de alimento vivo y alimento verde, y también alcanzará un tamaño máximo de 6 cm.
Identificaremos al macho por su cuerpo estilizado, ya que las hembras son más grandes y redondas. Pueden llegar a gestar entre 90 y 110 crías al mes.
Disponen de una amplia variedad de colores y formas de las aletas. Existen distintos tipos como el Molly albino, balón, marmolado, mexicano, etc.
- Colas de Espada
Suele habitar aguas que oscilan temperaturas entre 20 y 28º C, con pH entre 7 y 8. Necesitará comida desecada y vegetal y podrá llegar a alcanzar un tamaño máximo de 12 cm.
Diferenciaremos el sexo de nuestros Cola de Espada ya que el macho es más delgado y posee las aletas más rectas, en cambio la hembra es más rechoncha y tiene las aletas más redondeadas. Suelen llegar a tener más de 120 crías en un mes.
Existen multitud de variedades (lira, rojo sangre, naranja ananá…) aunque al única salvaje es la verde. Suelen disponerse en la zona media o superior del acuario y busca refugio en las plantas. Es recomendable tener parejas de tamaño similar.