Ya quedan pocos, pero aún hay circos en nuestro país que basan su reclamo en tener como principales números artísticos actuaciones con animales, tales como elefantes, osos, leones, simios…
Que las simpáticas focas no te engañen, estas criaturas pasan la mayor parte de su vida encerrados en jaulas, fuera de su hábitat natural, viajando de un lugar a otro en pequeños espacios y en condiciones atmosféricas a las que no están acostumbrados, viviendo en soledad… Todo esto para maximizar la cantidad de espectáculos, pero se trata de diferentes formas de maltrato y explotación.
¿Sabías que a los tigres pueden llegar a quitarles las garras? ¿O que los elefantes pueden pasar atados por al menos una pata casi la totalidad de su vida? Puede que a tu hijo le llame mucho la atención ver animales que saltan por aros con fuego, pero no somos conscientes del sufrimiento que hay detrás de esto, horas de adiestramiento, látigos y comportamientos antinaturales.
En España
Aunque 17 comunidades autónomas de nuestro país reconocen la prohibición de no utilizarse animales si están sujetos a maltrato o explotación, actualmente no contamos con legislación relativa a este tema de forma específica. A diferencia de estos datos, cada vez son más lugares que prohíben los circos con espectáculos animales: como Canadá, Finlandia, Suiza, Suecia, Dinamarca, o el caso más reciente de Río de Janeiro (Brasil).
Algunas historias:
Cuando Júpiter encontró a julia: En Colombia, una mujer amante de los animales rescato a Júpiter, un león explotado y maltratado en un circo para finalmente ser abandonado a su suerte. Ahora vive feliz en un refugio.
Perdido en Barcelona: Babuino rescatado de un circo en 2008, vivía desde hacía 8 años en una jaula de apenas dos metros, sufriendo ansiedad, problemas motores y bajo peso corporal….
El pequeño pony que necesitaba descansar: Cuando este animal no pudo dar más vueltas en su carrusel, lo abandonaron tirado en el suelo, el resto de personal se marchó dejándolo allí solo. Jamás volvió a levantarse.
Tigresa que no supo sobrevivir: En un rescate de un grupo de 5 leones y 9 tigresas, abandonado por un circo argentino en Paraguay. Una tigresa, agobiada por el viaje y sus nuevos congéneres, murió tras ser atacada por otro ejemplar en el traslado.
Hay miles de historias, pero en resumen cuando los animales ya no sirven para actuar bajo las luces porque están enfermos, no obedecen o son demasiado viejos, suelen ser vendidos, donados a zoos o sacrificados… piénsatelo antes de comprar las palomitas y dirigirte a la carpa instalada a las afueras de tu localidad. Circo sí, siempre, pero sin animales.