Manadas de perros

Huskies pulling sledge

En muchas ocasiones después de tener un perro con el que la convivencia ha sido fácil y adecuada se decide aumentar la manada trayendo otro perro a casa, lo que en muchos casos supone el inicio de los problemas porque el que estaba en casa se siente destronado, porque no saben que rol deben de tener cada uno, porque no se llevan bien… Las razones pueden ser muy variadas.

Antes de llevar a un perro a casa hay que saber como es el que ya se tiene, es un perro socializado o por el contrario tiene dificultades para relacionarse con los demás, si es así, a lo mejor no es la mejor decisión llevar un perro a casa. Es un perro sumiso o por el contrario es el jefe de la casa, es territorial… todos estos aspectos son muy importantes antes de presentarse en casa con otro perro.

Una vez que se ha tomado la decisión de llevar a otro perro a casa, es importante que el primer encuentro se realice fuera de la casa, que ambos perros estén cansados, es decir que se haya dado un paseo largo antes de que se produzca el encuentro y se observará como reaccionan. Es importante estar atentos al lenguaje corporal de ambos cánidos, será importante corregir a ambos si tienen alguna conducta inadecuada.

Una vez que se hayan olido y visto y hayan estado interactuando el siguiente paso será caminar juntos, dar un paseo a ver como se encuentran ambos de cómodos. Si no hay problemas se pueden llevar a casa. Si en algún momento ha habido algún conflicto será mejor repetir el encuentro al día siguiente.

En la casa es importante que ambos tengan sus cosas, es decir, muchos dueños cometen el error de que coman del mismo plato, cada uno tiene que tener el suyo y también deben de tener su bebedero para evitar conflictos.

Los juguetes son elementos que pueden provocar algún encontronazo sobre todo si el que estaba en casa tiene cierta predilección por alguno incluso considerándolo su posesión. El primer día es mejor que no haya juguetes y según se vayan relacionando se van introduciendo o no.

Es importante que entre los perros que se tengan en casa haya la misma frecuencia de energía, esto quiere decir que no haya uno más dominante que otro, o al revés que uno sea excesivamente sumiso, es importante observarlo y realizar las correcciones oportunas para corregirlo y que los perros adopten el mismo papel.

La convivencia entre un perro y un gato

A la hora de establecer una convivencia entre estas dos especies, debemos tener presente que ambas son predadoras, es decir que cazan para alimentarse. Todos hemos visto algún gato detrás de un pájaro o de una mosca, intentándoles coger, aunque el felino estuviera en una casa con todas las necesidades alimentarias cubiertas, esto no es más que una respuesta a sus impulsos. Estos impulsos de cazador de los canes y los felinos se pueden controlar y reducir a través de una buena socialización y poniendo a su disposición juguetes que hagan que esas respuestas instintivas cazadoras queden satisfechas.

La convivencia entre dos cachorros es mucho más sencilla, ya que ninguno de los dos tienen adquirido un rol dentro de la casa y durante los primeros meses de vida se adaptan mejor a los cambios y a las novedades.

El introducir un perro cachorro en un hogar donde ya existe un gato adulto, se debe realizar con precaución y analizando cuáles son las reacciones de nuestro gato con respecto a otros animales más grandes que él. Las respuestas más típicas son:

  • El gato pasa del perro, sigue haciendo su vida, sin tener en cuenta al perro.
  • Nuestro felino reacciona mal y se pone a bufar y a gruñir.
  • Otra reacción es que tienda a esconderse para evitar cruzarse con el perro.

 Iniciaremos la convivencia introduciendo al cachorro dentro de un transporting o sujetándolo nosotros en brazos, para saber cuál de las tres reacciones tiene el gato. Su reacción va a depender de la socialización que haya tenido y el rol que desempeñe en casa, si actúa como líder hay que hacerle ver que va a seguir siéndolo. Si hay un intento de ataque inmediatamente los separaremos y lo intentaremos en otro momento. El gato también puede tener una actitud curiosa acercándose a olfatear y a olisquear y en esa situación les dejaremos porque es su forma de relacionarse y conocerse.

Les observaremos, no les dejaremos nunca solos y si tenemos que salir de casa les dejaremos en habitaciones separadas.

Es importante que cada uno tenga su independencia en el alimento y en el descanso. Es decir cada uno debe tener su comedero y su bebedero porque sino pueden empezar los conflictos por el alimento. También es necesario que cada uno tenga su sitio de descanso.

Cuando existan interacciones positivas, debemos premiarlos justo en el momento en que se estén produciendo, para que asocien la situación a un beneficio y se reproduzca en el tiempo. En un principio el refuerzo positivo será una golosina, con el tiempo se puede sustituir con un refuerzo social como por ejemplo una caricia.

La integración de un perro en una casa que ya habita un gato, debe ser tranquila, sin imponer ni forzar la situación, porque eso sólo puede tener como resultado problemas. Es necesario que tengamos paciencia y respetemos el ritmo de adaptación de cada uno.

Accesorios para gatos I

Antes de recibir a nuestro felino en su nuevo hogar es necesario realizar los preparativos convenientes para que cuando llegue lo tenga todo listo y así poder cubrir las necesidades básicas de nuestra mascotas y con este aspecto resuelto el inicio de la convivencia será el adecuado.

Los accesorios para gatos los podemos encontrar en cualquier tienda de mascotas, centro comercial o tiendas especializadas en gatos. No es necesario realizar un gran desembolso económico sino que aquello que necesite nuestra mascota exista en el hogar y sea cómodo y adecuado para él.

Transportin. Es un de los primeros accesorios que debemos adquirir, nos será muy útil para realizar los desplazamientos al veterinario, a casa, viajes… Los modelos existentes son muy variados posiblemente los más aconsejables para su comodidad son aquellos que se puede separar la parte de arriba del suelo, para coger al felino con mayor comodidad, pero todos son igual de útiles. Para hacer más llevadera la estancia de nuestra mascota dentro del transportin, podemos introducirlo una manta, tela, toalla u otro material con el que se sienta identificado, ya que el gato se sentirá incómodo sí se tiene que tumbar directamente sobre el suelo de este accesorio.

Gatera. este elemento no va a estar presente en todas las casas, solo en aquellas donde exista la posibilidad de que nuestro gato salga. Sí le permitimos salir a la calle es un instrumento muy útil para no estar constantemente pendiente de abrirle y cerrarle la puerta

Comedero y bebedero. Estos dos accesorios posiblemente sean los más importantes en la vida diaria del gato, ya que a través de ellos puede acceder a la comida y al agua. Estos dos elementos deben ser firmes, es decir, que no se rompan con facilidad y que no se muevan con el roce. Intentaremos adquirir un comedero de material que no sea plástico, este tipo con el tiempo mantiene el olor de la comida, posiblemente para nosotros no pero los gatos tiene el olfato muy desarrollado y detectarán el olor, y es posible que rechacen la comida porque piensen que no es comida fresca. Sí les vamos alimentar con alimento húmedo y seco, podemos poner a su disposición un comedero doble que nos resultará muy práctico. Es importante que el comedero le coloquemos en un lugar tranquilo y silenciosos de la casa, a los felinos no les gusta que les observen mientras comen o que haya demasiada gente cerca de donde se esta alimentando. El lugar debe ser tranquilo y estar lejos de su caja de arena para que no le moleste los olores.

El aseo de estos accesorios se debe realizar a diario, tener en cuenta que los felinos son muy aseado y limpios y tienen un olfato muy desarrollado que hace que no les gusten los olores ni la comida rancia.

Nuestro perro ante la llegada de un bebé

Ante la llegada de un bebe a nuestras vidas, nos suelen asaltar dudas de si un perro es adecuado en nuestro hogar y de cómo se va a desarrollar la convivencia entre ese pequeño que esperamos y el cánido que vive en nuestra casa. Esa incertidumbre puede ocasionar miedos e inseguridades ante la posible aparición de los celos del perro hacia nuestro/a niño/a.

La mayoría de los canes tienen curiosidad hacia el bebe y no tienen ningún tipo de problema para adaptarse a la nueva situación que se presenta en el hogar. Si es cierto que existe un grupo minoritario de cuadrúpedos que pueden percibir a los pequeños como seres extraños, ya que no han visto ninguno anteriormente y presentan algunas dificultades en la convivencia ante esta situación, por lo que debemos actuar para prevenir conflictos y accidentes.

  • Debemos recordar si nuestra mascota ha tenido un comportamiento hacía algún humano sea adulto o no, o alguna acción de caza hacia otros animales como (pájaros, conejos, gatos…).

Si la respuesta es afirmativa debemos consultar con nuestro veterinario o con un experto en comportamiento canino, que nos aconseje y nos oriente y si fuera necesario que establezca unas pautas de intervención para reeducar a nuestro perro y así reducir la posibilidad de un comportamiento agresivo hacia el niño/a.

De todas formas, también debemos tener en cuenta, que a veces los perros tienen un comportamiento afable hasta la llegada del bebe, en ese momento se produce un cambio de actitud en el cánido porque se le presta menos atención y puede tener como consecuencia la aparición de celos que provoquen una convivencia complicada. Ante esta situación deberemos de estar atentos para actuar inmediatamente.

Hemos hablado de los celos, pero ¿qué son los celos y porqué aparecen en nuestros perros? Los celos tienen que ver con la educación que ha recibido y brotan porque no les hemos dejado claro la situación que ocupan en nuestra unidad familiar. Los celos normalmente los desarrollan porque desde la llegada del perro a nuestro hogar le hemos dejado que desempeñase la función de líder. Hay que dejarle claro que nosotros somos los que lideramos nuestra familia, porque sino tendrá como desenlace que no aceptará las incorporaciones de nuevos miembros a la unidad familiar. Ante cualquier síntoma debemos buscar ayuda, pero no todo es negativo también existe la parte positiva de que tengamos un perro en casa cuando llegue nuestro pequeño, y es que entre ellos se va a generar un vínculo que va a ser favorable en todos los sentidos posibles, como por ejemplo el bienestar emocional, la compañía, el tener un amigo leal, un compañero de juegos, y desde el punto educativo, vamos a poder enseñar a nuestro hijo respeto, valores, tolerancia, empatía…

Por lo que podemos concluir, que siempre hay que estar atento antes las señales que manifieste el perro para actuar, pero que también debemos tener en cuenta los aspectos positivos y beneficiosos que produce este animal de compañía.

Crecimiento del perro y del cachorro II

En el anterior artículo se han establecido algunas bases sobre el autocontrol y las características de los cachorros y los adolescentes. En este vamos a continuar con el apartado de la socialización y la prevención de la agresividad.

Establecimos que era necesario socializar al perro para evitar problemas de comportamiento y que desarrolle conductas disruptivas en la convivencia. Hay que tener en cuenta que los perros son seres sociales, son descendientes directos del lobo y estos viven en manadas, si no permitimos que nuestro perro aprenda a comunicarse y a relacionarse nunca será capaz de vivir en manada, y en el hogar es participe de la manada que compone con los humanos.

Hemos hablado del aprendizaje gradual, del  entretenimiento, la diversión, concentración y como todo esto se debe realizar de forma paulatina. Volvemos al ejemplo del niño de 5 o 6 años ¿le podemos exigir autocontrol? ¿Podemos conseguir que aprenda normas de un días para otro? La respuesta es no, debemos ser pacientes con nuestra mascota también. El uso de la agresividad tirando de la correa, poner el dedo índice de forma amenazante o gritando todo el día no servirá para que nuestro perro aprenda antes sino para que nos coja miedo  y se ponga a la defensiva. Para que aprenda es necesario:

  1. Realizar una intervención temprana, comenzar a los 4 meses con la educación básica.
  2. Mantener la correa floja, si tensamos la correa lo único que lograremos es transmitir tensión y agresividad a través de ella, tened en cuenta que la correa es el instrumento que tenemos para comunicarnos con nuestro perro.
  3. Es necesario mantener la calma, si nosotros no somos capaces de autocontrolarnos como podemos exigir a nuestro perro que se autocontrole.

Si no cumplimos con estos aspectos nuestras reacciones tenderán hacia la agresividad y le exigiremos más de lo que puede dar, el resultado será que nuestro perro gruñirá y nos enseñara los dientes.

Por lo que podemos concluir que es importantes que seamos capaces de respetar los ritmos de nuestro perro y que seamos capaces de expresar tranquilidad y tener paciencia a la hora de enseñar normas de convivencia y autocontrol a nuestra mascota. En vez de gritar cuando hace algo mal, la respuesta correcta a ese comportamiento es darle la espalda e irnos hacia el lado contrario, esto es lo que hacen los adultos cánidos cuando sus cachorros no hacen algo bien. Otra de los comportamientos a desarrollar es el refuerzo positivo, es necesario premiar a nuestro perro cada vez que haga algo bien para que asimile y vaya interiorizando el comportamiento.

Lenguaje de los conejos

Los conejos igual que el resto de los animales tiene su propio lenguaje y de la observación dependerá saber si la mascota está contenta, enfada, o que la sucede. En muchas ocasiones se falla en la relación con el animal porque no se sabe que está comunicando, a continuación voy a establecer los gestos más comunes y sus significados:

Olfatear: los conejos son muy dados a acercarse a todo lo que les rodea y mover su pequeña nariz para olfatear el objeto o persona que hay a su lado. Está acción es muy habitual porque son animales muy curiosos, y el sentido del olfato le tiene muy desarrollado, a través de él saben si viene un depredador o no en el medio natural.

Correr: en muchas ocasiones seguramente ha intentado coger a su conejo, y justo cuando se iba acercar ha salido corriendo, este es un juego que les gusta mucho, es parecido al pilla – pilla de los niños/as. En su hábitat natural salen corriendo al menor ruido u olor de peligro, en casa esto no sucede pero suelen ser muy juguetones.

Zapatear con las patas traseras: A veces se enfadaran con su mascota, pero otras será ella quien se enfande y lo hará notar, para ello zapateará dentro de la jaula con las patas traseras, las razones más habituales de enfado, es que no le dejan salir de la jaula, quieren mimos y no se les da o que quieren comer alguna “chuche” que están oliendo.

Escarbar: Cuando hacer esto en la jaula o utilizan el papel de la jaula para hacerse una madriguera eso es que están en celo. Hay que tener en cuenta que cuando esto ocurre montarán todo lo que tengan cerca incluida la pierna de su amo.

Escalar o subirse a las alturas: Les gustará subirse al sofá, a la mesa, en definitiva a cualquier lugar que esté alto porque debido a su curiosidad por lo que les rodea les gusta estar a las alturas para ver lo que se ve desde allí.

Se pone de pies den la jaula: Esta postura es muy habitual cuando quieren salir de la jaula, cuando ellos consideran que ha llegado su momento de paseo. También lo harán cuando estén echando comida o pienso en la jaula, también se elevarán para intentar quitárselo de las manos.

Subir la cabeza hacia arriba. Es su forma de pedir mimos, cuando busquen su mano o les den unos golpecitos con la cabeza les estarán diciendo que quieren caricias.

>

Cerdo Vietnamita: Alojamiento y cuidados

En el artículo anterior se hablo de las características principales de estas mascotas así como de su alimentación, hoy voy hablar de que se tiene que tener en cuenta a la hora de establecer una ubicación para dormir al cerdo vietnámita así como las precauciones que se deben de tener para que no enferme ni tenga comportamientos poco deseados para la convivencia.

Los cerdos vietnamitas donde más a gusto se encuentran es en el exterior, así que si se tiene una casa con jardín y/o patio este será el lugar adecuado para hacer su vida cotidiana, en el caso de que se quiera que el cerdo vietnamita duerma en el interior de una casa se podrá habilitar una habitación para él. Es importante que el patio o el jardín de la casa se encuentren vallados para que los perros del exterior no lo molesten y no tenga problemas con ningún cánido del vecindario. En el caso de que se tenga también un perro, se debe valorar el tipo de comportamiento que tiene con otros animales y como se desarrolla su convivencia, al menor atisbo de peligro será necesario separarlos y que tengan ubicaciones claramente diferenciadas con un soporte que no les permita entrar en contacto. Nunca se excogerá la opción de atarlo a un árbol o cualquier otro soporte, porque lo incomodará bastante incluso llegando autolesionarse por lo que es necesario que el pueda moverse con libertad.

El alojamiento y todas sus cosas tienen que estar accesibles, no deben existir escalones ni obstáculos que los impidan acceder, la razón viene fundamentada por su movilidad mientras son jóvenes no tienen dificultad para saltar y hacer lo necesario para llegar donde desean pero según se van haciendo adultos las movilidad se va reduciendo lo que les incapacita para subir una escalera o sortear un obstáculo.

En cuanto a la climatología, en la estación invernal hay que tener en cuenta cuantos grados puede bajar la temperatura, si se viven en zonas frías cuyo termómetro baja de los 10º por la noche, entonces se deberá de habilitar una caseta o un lugar semicerrado con mantas y otro equipamiento que le de calor.  En el verano por el contrario debe tener lugares donde se pueda resguardar del sol, es decir que tenga árboles u otros elementos que le puedan dar sombra. Para refrescarse será necesario ponerlo una piscina hinchable para que se pueda dar un chapuzón y con ello se le baje la temperatura, hay que tener presente que estos animales no jadean ni sudan por lo que la única opción que tienen es mojarse para lograr regular la temperatura. En cualquiera de las dos estaciones es necesario que tengan agua para beber de forma accesible para evitar que se deshidrate.

 Cerditos Vietnamitas