Las tortugas acuáticas

Estos pequeños animales pueden convertirse en la primera mascota de sus hijos puesto que se trata de mascotas que llaman mucho la atención de nuestros pequeños y su cuidado es muy sencillo, por lo que sería una manera muy divertida de otorgarles cierta autonomía y responsabilidades dentro de nuestro hogar.

En un primer momento deberíamos determinar el tipo de especie que nos interesa para tener en nuestra casa. De este modo podremos diferenciar entre tortugas terrestres y tortugas acuáticas. Bien es cierto que también existen tortugas marinas, aunque no se comercializan como mascotas. En el caso de las primeras requeriríamos disponer de un espacio muy amplio para que nuestro pequeño amigo pueda desarrollarse de forma saludable. Es por ello por lo que a pesar de ser una buena mascota deberemos analizar su futura calidad de vida en nuestra casa.

En el caso de las tortugas acuáticas, que será en las que nos centremos en este artículo, es mucho más sencillo. Estos animales requerirán unos cuidados muy específicos en cuanto a alimentación, el terrario, la iluminación del mismo, las filtraciones de agua y el aporte de calcio.

 Alimentación

Las tortugas son animales omnívoros por lo que es recomendable ofrecerles una dieta muy variada como zanahorias, lechuga, melón, manzanas, etc. Les encanta comer gusanos, pequeños insectos… aunque es bueno complementar su alimentación con pienso específico para ellas. En ningún caso deberemos darles a comer alimentos elaborados. En el caso de que no tenga acceso a la luz solar seria recomendable incluir alimentos que contengan la vitamina D3 que facilitarán la labor encomendada a las lámparas artificiales.

Terrario

La multitud de posibilidades que nos ofrecen para ubicar a nuestras mascotas van desde pequeñas casas redondas, ovaladas o en forma de riñón hasta enormes acuarios completamente decorados. Eso dependerá de nuestro gusto y del tiempo y el espacio que dispongamos para decorarlo. Lo que sí que será completamente necesario es que contenga dos partes separadas. Por un lado deberá contener una parte de agua con una profundidad suficiente para que pueda nadar y otra parte seca en la que pueda salir a tomar el sol.

Iluminación

Lo más recomendable es que puedan tomar la luz directamente del sol, pero si no es posible deberemos instalar una lámpara de luz ultravioleta que les ayude en la producción de la vitamina D3. Esta vitamina es necesaria para producir el calcio que formará sus huesos y su caparazón.

Filtraciones del agua

Deberemos instalar un filtro en el terrario semejante al que llevan los acuarios para poder eliminar los desechos que producen. Asimismo necesitará que se cambien el agua con frecuencia puesto que cuanto más limpia está el agua más a gusto estará nuestra mascota.

Suplemento de calcio

Como ya hemos dicho antes las tortugas necesitarán un gran aporte de calcio puesto que es la base fundamental para la formación de sus huesos y de su caparazón. Por ello será necesario que complementemos su dieta con algún suplemento de calcio y de otros minerales que ayuden a que nuestra mascota crezca fuerte.

Abandono de la mascotas

La época veraniega es la estación donde más abandonos se producen de animales, perros, gatos y/o otros animales menos visibles como conejos, patos, iguanas… son llevados a las protectoras, perreras o en el peor de los casos se les deja en una cuneta, gasolinera o en el medio de un monte a que se busquen la vida mientras el animal mira como se marchan sus dueños y se queda esperando a que vuelvan a buscarlo.

Las vacaciones es el peor periodo, porque se quiere salir de la ciudad pero no se cuenta con la mascota para que sea un participante más del viaje o se busca una alternativa para que mientras estamos ausentes alguien nos lo cuide. A pesar de que es un factor importante a pensar antes de adquirir un animal si se tienen apoyos para que el día que se sale de viaje la mascota  no se quede sola. Otra opción si no se tiene un familiar o amigo que se pueda hacer cargo son los hoteles para mascotas cada vez más presentes en nuestro país. Hay opciones para evitar abandonar al animal pero el ciudadano español es muy poco responsable, una mascota no es un objeto que hoy se coge y mañana se deja, los animales también tienen sentimientos y el daño que le provocamos cuando se le deja en una cuneta en muchas ocasiones es irreversible no solo físicamente sino también mentalmente.

El nunca lo haría, es una frase que se ha dicho en alguna campaña de publicidad y es cierta, el siempre está a la espera de que llegues para saludarte, cuando estás enfermo siempre está cerca para darte unos quereres pero nosotros solo lo tenemos en cuenta para lo que nos apetece, cuando nos molesta se  busca la vía fácil y cobarde que no es otra que el abandono.

Cada año mueren muchos animales por culpa de humanos irresponsables que decidieron comprarse una mascota y dejarla en cualquier sitio, es necesario cambiar y comenzar a mentalizarse, que la mascota es un miembro más de la familia y que si no estamos dispuestos a que nos acompañe hasta el final de su vida no la adquieran, piensen en todas las situaciones que se pueden dar en las que una mascota no puede estar presente y si no tienen alternativas para dejarla con alguien o gastarse el dinero en un hotel no la compre, ni la adopte no le esta haciendo ningún favor a ese animal llevándoselo a casa.

Vacunas para perros

Cuando decidimos comprar o adoptar un perro debemos tener en cuenta que debemos llevarlo al veterinario para que le ponga las vacunas correspondientes. Las vacunas son medicamentos que se consiguen a partir de la modificación de organismos que dañan nuestros cuerpos. Cuando se inyecta una vacuna sobre un cuerpo sano, lo que hace es generar defensas para que la enfermedad no afecte y si lo hace el daño que produce es menor, es decir, las vacunas son un instrumento que usamos para evitar que nuestro cuadrúpedo enferme. Los perros, cuando nacen tienen cierto grado de inmunidad por la leche materna pero al poco tiempo desaparece y es necesario usar las vacunas para evitar que nuestro cachorro enferme.st

El calendario de vacunas lo establece nuestro veterinario. Éste decidirá en qué momento se le administrarán al perro, se debe evitar hacerlo cuando nuestra mascota esté enferma o esté baja de energía.

Una vez que se le ha inyectado la vacuna es necesario que no lo bañemos inmediatamente. Es posible que nuestro cachorro se sienta molesto y/o tenga fiebre en la zona de aplicación, son efectos secundarios normales y por norma general a las 24 horas han desaparecido. En caso de que no fuera así y persistan es necesario llevarlo al veterinario para que vea a nuestra mascota y decida qué hacer.

La primera visita que realizamos a nuestro veterinario servirá para que le examine y determine que todo está en orden y lo desparasite y establezca el calendario de vacunas.

Las vacunas que se deben administrar a nuestro perro son las siguientes.

  •  Vacuna contra el Distemper moquillo: es una enfermedad que entre las diferentes razas de perros se puede contagiar con bastante facilidad a través de las distintas secreciones. Los síntomas más habituales son la fiebre y los vómitos.
  • Vacuna contra el Parvo moquillo: igual que la anterior, es bastante sensible al contagio, este virus lo que hace es atacar poco a poco al perro debilitándolo progresivamente.
  • Vacuna contra la Leptospirosis, o lo que es lo mismo la rabia. Esta enfermedad es muy peligrosa para los humanos porque nos pueden contagiar si la padece nuestra mascota. Esta afección le ataca al sistema nervioso y  les da fiebre entre otros síntomas. El perro, si padece esta enfermedad tiene muchas posibilidades de morir, si logra sobrevivir tendrá que pasar mucho tiempo para lograr recuperarse.
  • Vacuna contra la Hepatitis: se contagia a través de las distintas secreciones ya sea heces, orina, mucosidad o saliva. La enfermedad empieza con síntomas similares a la de Distemper y finaliza afectando al sistema renal del perro.
  • Vacuna contra la Tranqueobronquitis. Esta enfermedad se observa sobre todo en lugares donde conviven muchos perros juntos, es de fácil  contagio entre canes. Los síntomas son tos principalmente, a veces fiebre y pérdida del apetito.
  • Vacuna contra la Coronavirus: Esta enfermedad entre perros puede tener el desenlace que no queremos, la pérdida de nuestro cachorro. Es una enfermedad que ataca al aparato digestivo provocando que nuestra mascota vaya perdiendo el apetito poco a poco.

Accesorios para gatos I

Antes de recibir a nuestro felino en su nuevo hogar es necesario realizar los preparativos convenientes para que cuando llegue lo tenga todo listo y así poder cubrir las necesidades básicas de nuestra mascotas y con este aspecto resuelto el inicio de la convivencia será el adecuado.

Los accesorios para gatos los podemos encontrar en cualquier tienda de mascotas, centro comercial o tiendas especializadas en gatos. No es necesario realizar un gran desembolso económico sino que aquello que necesite nuestra mascota exista en el hogar y sea cómodo y adecuado para él.

Transportin. Es un de los primeros accesorios que debemos adquirir, nos será muy útil para realizar los desplazamientos al veterinario, a casa, viajes… Los modelos existentes son muy variados posiblemente los más aconsejables para su comodidad son aquellos que se puede separar la parte de arriba del suelo, para coger al felino con mayor comodidad, pero todos son igual de útiles. Para hacer más llevadera la estancia de nuestra mascota dentro del transportin, podemos introducirlo una manta, tela, toalla u otro material con el que se sienta identificado, ya que el gato se sentirá incómodo sí se tiene que tumbar directamente sobre el suelo de este accesorio.

Gatera. este elemento no va a estar presente en todas las casas, solo en aquellas donde exista la posibilidad de que nuestro gato salga. Sí le permitimos salir a la calle es un instrumento muy útil para no estar constantemente pendiente de abrirle y cerrarle la puerta

Comedero y bebedero. Estos dos accesorios posiblemente sean los más importantes en la vida diaria del gato, ya que a través de ellos puede acceder a la comida y al agua. Estos dos elementos deben ser firmes, es decir, que no se rompan con facilidad y que no se muevan con el roce. Intentaremos adquirir un comedero de material que no sea plástico, este tipo con el tiempo mantiene el olor de la comida, posiblemente para nosotros no pero los gatos tiene el olfato muy desarrollado y detectarán el olor, y es posible que rechacen la comida porque piensen que no es comida fresca. Sí les vamos alimentar con alimento húmedo y seco, podemos poner a su disposición un comedero doble que nos resultará muy práctico. Es importante que el comedero le coloquemos en un lugar tranquilo y silenciosos de la casa, a los felinos no les gusta que les observen mientras comen o que haya demasiada gente cerca de donde se esta alimentando. El lugar debe ser tranquilo y estar lejos de su caja de arena para que no le moleste los olores.

El aseo de estos accesorios se debe realizar a diario, tener en cuenta que los felinos son muy aseado y limpios y tienen un olfato muy desarrollado que hace que no les gusten los olores ni la comida rancia.

Montar en bici y pasear a nuestro perro

Hemos hablado en multitud de post que es importante que nuestro perro haga ejercicio y que suelte toda la energía para que cuando esté en casa sea un perro tranquilo y calmado. Entre las opciones que tenemos para que nuestro perro queme la energía que le sobra tenemos la de montar en bicicleta y mientras vamos peleando nuestra mascota nos siga el ritmo.

Hay personas que les gustaría hacer este ejercicio pero les da miedo porque el perro puede tirar de la correa y como consecuencia nosotros acabar en el suelo, que se cruce o simplemente que nos resulte complicado establecer la dirección en la que queremos ir.

Todas estás dificultades se han quedado en el pasado, el mercado de las mascotas está en continua innovación e inventan todo tipo de artilugios para que la vida con nuestras mascotas sea más sencilla. Para que el paseo en bicicleta sea tranquilo y no tengamos las dificultades antes señaladas han creado el walkydog.

El walkydog es una barra metálica que se ajusta a la barra donde va el sillín, tiene tres resortes que hacen que el perro aunque tire de forma repetida la barra lo absorbe sin problemas. Los resortes se pueden anclar todos a la bicicleta o solo uno o dos, dependerá de la fuerza de nuestro cánido y de sí tira mucho o no, está claro que sí ajustamos los tres anclajes a la bicicleta iremos más seguros.

Lo que podemos hacer ante de comenzar a pedalear es andar un poco, para que el perro se acomode al nuevo dispositivo y se acostumbre a ir al lado de la bicicleta. Al ir la barra anclada en el sillín nos permite llevar las manos libres para controlar el manillar y para dar la correcciones necesarias a nuestro perro.

El walkydog tiene otro accesorio que es low rider que se ajusta a la rueda trasera y está dirigido a los perros de gran tamaño que tienen mucha fuerza y que con el walkydog no tienen suficiente.

Este dos dispositivos nos permites hacer deporte y compartir un rato de ocio con nuestra mascota sin peligro además que nuestro perro lo agradecerá porque puede hacer ejercicio y quemar la energía que le sobra.

Haciendo un sondeo por internet de lo que puede costar este dispositivo no es excesivamente caro, cuesta alrededor de 40 euros y nos puede servir también en un momento determinado como correa corta.

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Perro feliz

Muchos dueños de perro se piensan que su perro es feliz porque le adornan con ropa, porque le ponen el mejor collar pero a un perro le da bastante igual los adornos que se le coloquen. Un perro es feliz si se le dan respuesta a tres aspectos básicos ejercicio, obediencia y cariño y en este orden para lograr el equilibro perfecto.

Dar más importancia al cariño que a las otras dos o al abediencia es un error muy común. Otro error bastante repetitivo es pensar que por tener un terreno en el que el animal se pueda mover ya esta todo solucionado y no es así, y sino utilicemos la empatia por  un momento, la empatía es la característica que consiste en ponernos en el lugar del otro, nosotros seriamos felices si tuvieramos una casa con jardín y no nos permitieran salir de ahí, la respuesta seguramente será que no para ellos tampoco es suficiente no podemos olvidarnos que los perros son descendientes de los lobos, y esto recorren largas distancias en busca de comida por lo que en el ADN de los perros también esta impreso esa necesidad de moverse y salir a pasear.

Cual es la cantidad justa de ejercicio, la respuesta es más o menos una hora y media al día, sí es más tiempo  mucho mejor y puede ser caminar o que venga con nosotros mientras estamos realizando algún deporte como correr, andar en bici, patinar… es una forma muy sana de compartir nuestro tiempo de ocio con nuestro perro haciendo una actividad que nos guste y que al perro también le va a encantar.

En el aspecto de la obediencia, esta no solo consiste en que el perro se siente, tumbe y todas esas cosas que se enseñan de obediencia básica, es necesario establecer unas normas claras y concretas que al perro le hagan tener claro que puede y que no puede hacer. Es necesario que todos los miembros de la familia tengan claro cuales son esas normas para evitar que el perro se aproveche de la situación. Estas normas pueden ser no pedir mientras estamos comiendo, no subirse al sofá o no dormir en la cama entre otras muchas que se nos puedan ocurrir para el buen funcionamiento de la convivencia.

Por último afecto, este le podemos transmitir a través de caricias, jugando con el perro… en este aspecto normalmente no se tiene ninguna dificultad pero debemos tener claro que es el último aspecto para lograr tener un perro feliz.

Mascotas y tercera edad

Hay personas que llegan a la jubilación y no tienen muy claro en que ocupar su tiempo libre, otras que pierden a su pareja con la que llevan casadas 40 años y siente un vacío y una soledad inmensa en sus vidas, para todas ellas una mascota puede ser una excelente compañía y una excelente ocupación.

Cuando se tiene un animal, uno mismo pasa a un segundo plano se deja de pensar, en la articulación que duele, sí los hijos/as y nietos/as hace mucho tiempo que no vienen hacer una visita. El animal es la preocupación, si hay que llevarlo al veterinario, si hay que sacarlo a la calle, si hay que enseñarle unos mínimos para que la convivencia sea adecuada. Todo ello hace que se este ocupado, en definitiva que se tenga una actividad y por lo tanto una motivación para hacer cosas.
Qué animal es el más adecuado para regalar, antes de acudir a una tienda de animales se deberá sondear a la persona, normalmente optarán por uno que tuvieron en la infancia, aunque también habrá que tener en cuenta aspectos como la movilidad de la persona, la capacidad para poder atenderse a sí misma y a un animal. Todos estos aspectos ayudarán a decantarse por uno u otro animal.

Cuando una persona mayor vive sola, los tiempos de pensar en su salud, de no salir de casa, de buscar constantemente solicitando la atención de la familia aumentan. Es normal porque la soledad es el peor de los sentimientos que se puede tener en esta vida. Es más, cuando una persona experimenta la soledad, es muy probable que su salud se resienta, y empiece a enfermar.

Hay estudios de científicos americanos que han demostrado que si se tiene un animal se incrementa el tiempo de vida.
Los animales hacen que la persona se mantenga activa, hay que establecer rutinas, hay que sacarlos a pasear, establecer una obediencia básica. Un ejemplo es una persona que le cuesta salir de casa, porque hace poco que ha perdido su pareja y no tiene demasiadas relaciones sociales y está desarrollando cierta angustia y apatía. La tenencia de una animal que necesite salir a la calle va a tener como consecuencia que ande, que se comunique con personas que también tengan perros, cariño por parte del animal y expresión de los sentimientos. Es muy posible que esa persona tenga más facilidad para expresar su duelo a su mascota que a otra persona porque a diferencia de los humanos, los animales no juzgan ni te dicen lo que tienes que hacer, te dan comprensión siempre.

Paseando a nuestro perro

 

El salir a la calle es un hábito que se realiza varias veces al día y con una frecuencia diaria, y que debemos tener muy presente cuando tenemos un perro, ellos necesitan pasear por la calle, para cubrir sus necesidades fisiológicas, pero también para relacionarse con otros perros, hacer un poco de ejercicio, jugar y estimular todos sus sentidos.

 

A la hora de pasear a nuestro cuadrúpedo, debemos tener en cuenta una serie de orientaciones básicas

 

  • La correa: esto no es más que un instrumento  que nos permite comunicarnos con nuestro perro, es la extensión de nuestro brazo. Si está demasiado corta con casi toda seguridad le generaremos stress, porque no le dejaremos coger un poco de distancia para hacer sus esfínteres, oler a otros perros… La correa debe tener cierta extensión para que el perro pueda caminar adelante o detrás de nosotros y pueda hacer sus “cosas” tranquilamente.
  • El collar: Nunca utilizaremos un collar de pinchos o similares, que le provoquen daño o stress porque lo único que estaremos generando en nuestra mascota, es tensión, nervios y agresividad. Recordad que los perros aprenden por asociación, si la respuesta  es negativa  que es la consecuencia de estos collares, nuestro perro vivirá en un continuo estado de nervios y miedo.
  • Estimulación mental. Salir al exterior supone encontrarse con numerosos estímulos olfativos, visuales, táctiles y mentales. Si las salidas son rápidas y enseguida queremos volver a casa, estaremos generando en nuestro perro una fuente de estrés, los paseos son para disfrutar no para que sean una actividad contra reloj como el resto de tareas de nuestro día.
  • Ejercicio: La cantidad de ejercicio va a depender de la raza, pero no consiste en llegar al parque y estar una hora lanzándole la pelota, es mucha más saludable e interesante ir al campo dar un paseo y permitirle quemar energía, porque el decide correr, parar, saltar venir, volver a irse. Mientras que correr detrás de una pelota es una actividad monótona, es mucho más productivo relacionarse con otros perros y que juegue con ellos.
  • Duración y frecuencia. Va a depender de la edad de nuestro perro. Si es un cachorro tendremos que sacarles más a menudo para cubrir sus necesidades fisiológicas en tiempos cortos, porque mucho tiempo en la calle se agotan. Si nuestra mascota es adolescente, saldremos tres veces al día y una de ellas será con más duración que las otras dos. En la etapa adulta tres veces al día con misma duración unos 20 minutos.
  • Instrucciones. En muchas ocasiones cuando vamos con nuestro perro, le damos una cantidad de órdenes seguidas que no cumple con ninguna porque no le da tiempo. Hay que darle una orden formulándola con pocas palabras, y de forma clara.

Por último hay que tener en cuenta que el paseo es el momento de ocio para nuestro perro y para nosotros que le acompañamos, convertirlo en un momento de tensión puede ser muy fácil, si vamos agobiados, estresados, o por la información que transmitimos mediante la correa, o nuestro lenguaje postural es de tensión terminará realizando ese aprendizaje y será de todo el paseo menos divertido para nuestro perro.

Llamando a nuestro perro

Es frecuente que cuando salimos a pasear al campo o al parque veamos a personas paseando con sus mascotas, pero es curioso que muchos de estos individuos no se atreven a dejarles sueltos por miedo a que sus perros no vuelvan, algo que no es muy adecuado para el bienestar del can, ya que corretear suelto, le permite relacionarse con otros perros, correr, jugar, olisquear… lo que es muy positivo para su bienestar físico y mental.

¿Pero porqué nuestro perro no acude a la llamada?

Existen diferentes razones por las que nuestra mascota no acude cuando la llamamos. La principal suele ser la falta de vínculo con él, bien porque no dedicamos tiempo a relacionarnos o jugar con él, o porque tiene asumido que cada vez que se acerca a nosotros/as le regañamos y nos tiene asociado a algo negativo, por lo que nuestro perro no va a dejar de hacer cosas que le gustan por venir con nosotros/as cuando el estímulo que le estamos mandando es negativo.

Otra razón de no acudir a la llamada, es porque no la tienen interiorizada, para lo cual, es necesario enseñarle que cuando pronunciamos una palabra el tiene que dejar de jugar, relacionarse con otros perro, olisquear… y acudir donde nos encontramos.

¿Cómo realizar ese aprendizaje?

Lo primero que debemos de tener presente al iniciar este aprendizaje es que debe de ser progresivo, comenzaremos en casa para más tarde pasar a espacios abiertos como la calle, el parque, el campo…

Debemos establecer una palabra que al perro le sirva de consigna y la asocie a que tiene que acudir, es decir, que la vincule a la llamada. Para ello podemos utilizar palabras como “aquí”, “ahora”. Es necesario no utilizar palabras que estén muy presentes en nuestro vocabulario habitual como “ven” porque le podemos confundir.

Una vez establecida la palabra de consigna, iniciaremos el aprendizaje en una habitación donde no haya estímulos externos como la televisión u otras personas. Cuando acuda al “aquí” le premiaremos con una golosina perruna, cuando lo consigan iremos haciendo más compleja la llamada, por ejemplo añadiendo estímulos o llamándole desde otra habitación de la casa, siempre reforzando positivamente el comportamiento para afianzarlo.

Una vez conseguido en el hogar pasaremos a realizarlo en un lugar al aire libre que no esté transitado. El aprendizaje aquí será como retroceder un poco porque es un espacio nuevo, pero serán más rápidos los avances. Para ello, al principio le colocaremos una correa de 5 metros o más, cuando haya adquirido el aprendizaje y estemos seguros de nuestro perro, le soltaremos.

Hay que recordar que siempre hay que reforzar la conducta de nuestro perro de forma positiva, al principio le daremos comida o golosinas y luego pasaremos al reforzamiento social. Todo se aprende y se consolida si el estímulo que nos ofrecen es el adecuado.

Seguros para mascotas

Muchas personas cuando deciden tener un animal, no prestan atención a la necesidad de realizar un seguro a la mascota, normalmente los pensamientos que se anteponen son los de ¿qué va a pasar?, si el animal es bueno, no hace nada, pero hay que pensar que siempre es posible un imprevisto, o una acción poco afortunada puede provocar que denuncien al propietario del animal.

Es mejor prevenir porque simplemente que el perro salude y rasgue un abrigo u otra prenda y/o objeto puede provocar que la persona que ha sufrido el daño decida poner una denuncia. Del seguro solo se acuerda uno cuando pasa algo y en ese momento  ya es demasiado tarde para realizar los papeles.

Hoy en día todas las asegudaras tienen un apartado de seguros para mascotas, incluso si se navega un poco por internet se puede encontrar webs que se encargan de comparar los precios y asistencias de las diferentes aseguradoras.

En el caso específico de los perros hacen distinción entre los perros considerados peligrosos y los que nos, tienen esa etiqueta los rotweiler, los pastores alemanes, los pit bull, los doberman y algunos más que se pueden consultar en la legislación, para estos últimos no hay que pensar nada, es obligatorio realizar el seguro independientemente de la comunidad autónoma en la que se encuentren, en el caso del resto dependerá donde vivan será obligatorio o no.

Es muy importante a la hora de contratar un seguro, que se lea bien la llamada letra pequeña, existen seguros que no cubren a la persona que pasea al animal salvo que sea el propietario, es decir, que si se le presta a un familiar porque en ese momento están ausentes y sucede algo el seguro no los cubrirá. Además es importantes que otros aspectos cubre, como por ejemplo los accidentes de tráfico, las mordeduras, arañazos, deterioro de ropa… Es importante tener en cuenta todos los aspectos antes de firmar. Algunos seguros también incorporan la cobertura de veterinario, robo o fallecimiento. Las coberturas dependerán de lo que se este dispuesto a pagar, cuanto más elevado sea su coste posiblemente más coberturas tendrás.

Dentro de los seguros del hogar, hay algunos que también incluyen los desperfectos de la mascota, por ejemplo si se tiene un animal que se dedica a morder las paredes haciendo agujeros, el seguro del hogar pagará los gastos del arreglo.

A la hora de tener un animal valore también el tema del seguro la mayoría de los dueños ni lo piensan pero en muchas ocasiones te saca de apuros.

2093-Tachiño