Vacunas para perros

Cuando decidimos comprar o adoptar un perro debemos tener en cuenta que debemos llevarlo al veterinario para que le ponga las vacunas correspondientes. Las vacunas son medicamentos que se consiguen a partir de la modificación de organismos que dañan nuestros cuerpos. Cuando se inyecta una vacuna sobre un cuerpo sano, lo que hace es generar defensas para que la enfermedad no afecte y si lo hace el daño que produce es menor, es decir, las vacunas son un instrumento que usamos para evitar que nuestro cuadrúpedo enferme. Los perros, cuando nacen tienen cierto grado de inmunidad por la leche materna pero al poco tiempo desaparece y es necesario usar las vacunas para evitar que nuestro cachorro enferme.st

El calendario de vacunas lo establece nuestro veterinario. Éste decidirá en qué momento se le administrarán al perro, se debe evitar hacerlo cuando nuestra mascota esté enferma o esté baja de energía.

Una vez que se le ha inyectado la vacuna es necesario que no lo bañemos inmediatamente. Es posible que nuestro cachorro se sienta molesto y/o tenga fiebre en la zona de aplicación, son efectos secundarios normales y por norma general a las 24 horas han desaparecido. En caso de que no fuera así y persistan es necesario llevarlo al veterinario para que vea a nuestra mascota y decida qué hacer.

La primera visita que realizamos a nuestro veterinario servirá para que le examine y determine que todo está en orden y lo desparasite y establezca el calendario de vacunas.

Las vacunas que se deben administrar a nuestro perro son las siguientes.

  •  Vacuna contra el Distemper moquillo: es una enfermedad que entre las diferentes razas de perros se puede contagiar con bastante facilidad a través de las distintas secreciones. Los síntomas más habituales son la fiebre y los vómitos.
  • Vacuna contra el Parvo moquillo: igual que la anterior, es bastante sensible al contagio, este virus lo que hace es atacar poco a poco al perro debilitándolo progresivamente.
  • Vacuna contra la Leptospirosis, o lo que es lo mismo la rabia. Esta enfermedad es muy peligrosa para los humanos porque nos pueden contagiar si la padece nuestra mascota. Esta afección le ataca al sistema nervioso y  les da fiebre entre otros síntomas. El perro, si padece esta enfermedad tiene muchas posibilidades de morir, si logra sobrevivir tendrá que pasar mucho tiempo para lograr recuperarse.
  • Vacuna contra la Hepatitis: se contagia a través de las distintas secreciones ya sea heces, orina, mucosidad o saliva. La enfermedad empieza con síntomas similares a la de Distemper y finaliza afectando al sistema renal del perro.
  • Vacuna contra la Tranqueobronquitis. Esta enfermedad se observa sobre todo en lugares donde conviven muchos perros juntos, es de fácil  contagio entre canes. Los síntomas son tos principalmente, a veces fiebre y pérdida del apetito.
  • Vacuna contra la Coronavirus: Esta enfermedad entre perros puede tener el desenlace que no queremos, la pérdida de nuestro cachorro. Es una enfermedad que ataca al aparato digestivo provocando que nuestra mascota vaya perdiendo el apetito poco a poco.

Bizibili.com un servicio a tu medida

Por la vida que llevamos, a veces no tenemos tiempo suficiente para cuidar a nuestros perritos de la manera más adecuada. Con el ritmo de vida que tenemos y por razones también laborales, no estamos casi en casa o llegamos tarde. En consecuencia, nuestro perro se puede sentir solo o no le podemos dar el paseo adecuado…

Viendo la necesidad de muchas familias, se ha creado la empresa Bizibili. Aquellos que vivan en la comarca de Debagoiena en Guipúzcoa, tendrán la suerte de poder elegir alguno de los servicios que ofrecen. Aunque en principio parezca algo mucho más común en Norteamérica, cada vez se pueden encontrar este tipo de empresas aquí.

Según las necesidades de cada familia, contrataremos unos servicios u otros. Podemos elegir entre paseos de larga duración, cortos o de gran intensidad, servicio de canguro, visitas al veterinario o la peluquería, adiestramiento…

Paseos largos, cortos o de gran intensidad

Pasear a tu mascota es algo fundamental, ya que aparte de mantenerle físicamente en las mejores condiciones, también le mantiene psicológicamente estable. Por ello, dar varios paseos al día es importante para la salud y para relacionarse con otros perros.

Los paseos cortos consisten en un recorrido de 25 minutos que es adecuado para que el can haga sus necesidades y se estire para no quedarse agarrotado. Los paseos más largos, de 50 minutos, son más adecuados para aquellos perros que sean mucho más activos y necesiten moverse más.

El paseo largo o de gran intensidad es especial ya que están indicados para canes muy activos. Para ellos pueden ser adecuados los paseos por el monte o zonas de vía verde que le harán cansarse y agotar su energía.

Servicio de canguro

Cuando nos vamos unos días fuera y por circunstancias especiales no podemos llevar con nosotros a nuestra mascota, aparece el problema de dónde dejarlo. Pues esta empresa también ha pensado en eso, ofreciendo un servicio de canguro.

Consiste en varias visitas al domicilio durante el día para alimentar, pasear y cuidar de ella. Es conveniente que el perro siga en casa porque ya la conoce y cambiarle a un lugar desconocido puede crearle algunos problemas como el estrés. Al final del día, sabrás como está tu perro, ya que te notificarán su estado por SMS o Whatsapp.

Es conveniente que el perro nos conozca a nosotros y nosotros le conozcamos a él, por ello antes de realizar este servicio se concierta una entrevista en el propio domicilio para que nuestra presencia no le sea extraña.

 

Montar en bici y pasear a nuestro perro

Hemos hablado en multitud de post que es importante que nuestro perro haga ejercicio y que suelte toda la energía para que cuando esté en casa sea un perro tranquilo y calmado. Entre las opciones que tenemos para que nuestro perro queme la energía que le sobra tenemos la de montar en bicicleta y mientras vamos peleando nuestra mascota nos siga el ritmo.

Hay personas que les gustaría hacer este ejercicio pero les da miedo porque el perro puede tirar de la correa y como consecuencia nosotros acabar en el suelo, que se cruce o simplemente que nos resulte complicado establecer la dirección en la que queremos ir.

Todas estás dificultades se han quedado en el pasado, el mercado de las mascotas está en continua innovación e inventan todo tipo de artilugios para que la vida con nuestras mascotas sea más sencilla. Para que el paseo en bicicleta sea tranquilo y no tengamos las dificultades antes señaladas han creado el walkydog.

El walkydog es una barra metálica que se ajusta a la barra donde va el sillín, tiene tres resortes que hacen que el perro aunque tire de forma repetida la barra lo absorbe sin problemas. Los resortes se pueden anclar todos a la bicicleta o solo uno o dos, dependerá de la fuerza de nuestro cánido y de sí tira mucho o no, está claro que sí ajustamos los tres anclajes a la bicicleta iremos más seguros.

Lo que podemos hacer ante de comenzar a pedalear es andar un poco, para que el perro se acomode al nuevo dispositivo y se acostumbre a ir al lado de la bicicleta. Al ir la barra anclada en el sillín nos permite llevar las manos libres para controlar el manillar y para dar la correcciones necesarias a nuestro perro.

El walkydog tiene otro accesorio que es low rider que se ajusta a la rueda trasera y está dirigido a los perros de gran tamaño que tienen mucha fuerza y que con el walkydog no tienen suficiente.

Este dos dispositivos nos permites hacer deporte y compartir un rato de ocio con nuestra mascota sin peligro además que nuestro perro lo agradecerá porque puede hacer ejercicio y quemar la energía que le sobra.

Haciendo un sondeo por internet de lo que puede costar este dispositivo no es excesivamente caro, cuesta alrededor de 40 euros y nos puede servir también en un momento determinado como correa corta.

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¡Para no pasar un verano de perros!

Decían que iba a ser un verano fresquito, sin embargo este tiempo loco hace que lo mismo nos un día nos acordemos de gabardina guardada como que vivamos un apasionado romance con el aire acondicionado de la oficia.

No nos olvidemos que es verano, y que por muchas bajadas de temperatura que podamos sufrir, hay días que es imposible echarse a la calle. No os voy a contar nada nuevo de lo que muchas asociaciones y organizaciones por y pro la salud aconsejan en estos días. Pero si haceros un pequeño recordatorio a los que tenéis mascotas. Ya que ellos también necesitan un cuidado extra en esta época.

Tener siempre muchos bebederos con agua

Es importante tanto si tienes a tu mascota tanto dentro como fuera de tu casa que este tenga la posibilidad de siempre encontrar un punto donde refrescarse. Para ello es importante no solo el número de lugares donde pueda beber, sino que este agua siempre este en un punto fresco donde le dé la sombra.

No hay que olvidar también revisar el agua para evitar que esta esté sucia o con insectos. De esta manera evitaremos que beba agua estancada o, como pasa en muchos casos, de piscinas. Ya que no es solo malo para su salud por el cloro, sino que puede ser una trampa mortal para nuestro animal ya que les resulta complicado salir.

Buscarles sitios frescos

Es fácil dentro de una casa que un perro busque el suelo o espacios con ventilación para refrigerarse. Si están fuera de tu techo, recuerda ponerles techadillos de chamizo donde pueda coger alguna sombra. Es importante refrescarlos durante el día, ya sea mediante un manguerazo como con la humedad del suelo y plantas después de regar. Agradecerá poder tumbarse en el agua. Además puede sufrir al contacto del suelo caliente daños en las almohadillas de sus patas, es bueno revisarlas y echarles crema.

Horarios de paseo

Intenta buscar horarios para pasear fuera de las horas más calurosas, que son de 2 a 6 de la tarde. Buscando primeras horas de la mañana o cuando atardezca. Recuerda, al igual que llevas tu agua, darle de beber a él, o llevar para que beba.

Recuerda que no es bueno que el animal tenga un ejercicio excesivo. Buscar la sombra y parajes con grandes vegetaciones y zonas verdes, donde permitan su presencia, para jugar con él y hacer que corra.

Saneamiento

Un corte de pelo siempre se agradece en verano, y más cuando en el campo encontramos todo tipo e insectos como garrapatas y pulgas que se adhieran a nuestro amigo peludo. De igual manera conviene que no olvidemos ampliar el saneado de nuestro animal y las visitas al veterinario junto a tratamientos específicos de estas fechas.

Como ves, no es muy diferente estas recomendaciones a las que los expertos nos aconsejan a nosotros mismos. Recuerda que os achaques del calor nos afectan a todos. Y que un animal por muy acostumbrado a vivir a la intemperie, al vivir domesticado, depende siempre de su dueño. Por lo cual es tu responsabilidad su bienestar, no lo olvides.

 

Cuando el cachorro lloriquea por la noche

Una de las cosas más habituales que puede suceder cuando llevamos a un cachorro de 8 o 9 semanas a casa es que por la noche no deje pegar ojo porque echa de menos a su madres y a sus hermanos y por tanto se pone a lloriquear.

Esto se puede corregir sí, es algo que se debe intentar eliminar desde el principio de la convivencia para que no vaya a más, y provoquen largas noches de insomnio porque el cachorro no quiere dormir.

Lo primero que se debe hacer cuando llega a casa es establecer el lugar donde va a dormir, se establecerá la habitación y allí se colocará la cuna o manta como lugar de descanso para el cachorro. Es importante que la habitación sea fija, no se puede estar cambiando todos los días, la mascota debe tener claro cual es su lugar para dormir. Una vez establecido, las primeras noches se puede optar por colocar debajo de la cuna un reloj, para que el tic tac le relaje y le recuerde al corazón de la madre. También se puede colocar una botella con agua caliente. Estos métodos son útiles de forma transitoria.
Para evitar los lloros nocturnos, durante el día mientras os encontréis en casa, debéis llevarle a la habitación donde tiene la cuna y una vez allí oscurecerla como si fuera momento de dormir. Vosotros saldréis de la estancia y cerrareis la puerta, y seguiréis con vuestra rutina, con casi total seguridad el cachorro comenzará a llorar, se debe ignorar, porque si se responde a su llanto no se eliminará sino que se producirá el efecto contrario que cada vez vaya a más hasta el punto de ser insoportable.
Aunque se sientan mal porque el cachorro lloriquea, se debe de aguantar y esperar, en el momento en el que guarde silencio, se entrará en la habitación y se le felicitará efusivamente. Es probable que en el momento en el que se le felicite comience de nuevo a llorar, se ignorará el comportamiento saliendo de la habitación y esperando a que vuelva a guardar silencio para entrar y felicitar.
El cachorro poco a poco irá entendiendo que la atención que se le dedica, es en los momentos en los que está tranquilo, y por lo tanto al hacer la asociación poco a poco ira eliminando el llanto. Este proceso puede llevar un par de días si somos constantes.
Se puede pensar que al hacer este ejercicio los vecinos se quejarán, se va hacer durante el día, por lo que el llanto es más soportable durante las horas diurnas que no durante las nocturnas. Cuanto más constante se sea, antes se eliminará y dormirá plácidamente por la noche.

Perro feliz

Muchos dueños de perro se piensan que su perro es feliz porque le adornan con ropa, porque le ponen el mejor collar pero a un perro le da bastante igual los adornos que se le coloquen. Un perro es feliz si se le dan respuesta a tres aspectos básicos ejercicio, obediencia y cariño y en este orden para lograr el equilibro perfecto.

Dar más importancia al cariño que a las otras dos o al abediencia es un error muy común. Otro error bastante repetitivo es pensar que por tener un terreno en el que el animal se pueda mover ya esta todo solucionado y no es así, y sino utilicemos la empatia por  un momento, la empatía es la característica que consiste en ponernos en el lugar del otro, nosotros seriamos felices si tuvieramos una casa con jardín y no nos permitieran salir de ahí, la respuesta seguramente será que no para ellos tampoco es suficiente no podemos olvidarnos que los perros son descendientes de los lobos, y esto recorren largas distancias en busca de comida por lo que en el ADN de los perros también esta impreso esa necesidad de moverse y salir a pasear.

Cual es la cantidad justa de ejercicio, la respuesta es más o menos una hora y media al día, sí es más tiempo  mucho mejor y puede ser caminar o que venga con nosotros mientras estamos realizando algún deporte como correr, andar en bici, patinar… es una forma muy sana de compartir nuestro tiempo de ocio con nuestro perro haciendo una actividad que nos guste y que al perro también le va a encantar.

En el aspecto de la obediencia, esta no solo consiste en que el perro se siente, tumbe y todas esas cosas que se enseñan de obediencia básica, es necesario establecer unas normas claras y concretas que al perro le hagan tener claro que puede y que no puede hacer. Es necesario que todos los miembros de la familia tengan claro cuales son esas normas para evitar que el perro se aproveche de la situación. Estas normas pueden ser no pedir mientras estamos comiendo, no subirse al sofá o no dormir en la cama entre otras muchas que se nos puedan ocurrir para el buen funcionamiento de la convivencia.

Por último afecto, este le podemos transmitir a través de caricias, jugando con el perro… en este aspecto normalmente no se tiene ninguna dificultad pero debemos tener claro que es el último aspecto para lograr tener un perro feliz.

Paseando a nuestro perro

 

El salir a la calle es un hábito que se realiza varias veces al día y con una frecuencia diaria, y que debemos tener muy presente cuando tenemos un perro, ellos necesitan pasear por la calle, para cubrir sus necesidades fisiológicas, pero también para relacionarse con otros perros, hacer un poco de ejercicio, jugar y estimular todos sus sentidos.

 

A la hora de pasear a nuestro cuadrúpedo, debemos tener en cuenta una serie de orientaciones básicas

 

  • La correa: esto no es más que un instrumento  que nos permite comunicarnos con nuestro perro, es la extensión de nuestro brazo. Si está demasiado corta con casi toda seguridad le generaremos stress, porque no le dejaremos coger un poco de distancia para hacer sus esfínteres, oler a otros perros… La correa debe tener cierta extensión para que el perro pueda caminar adelante o detrás de nosotros y pueda hacer sus “cosas” tranquilamente.
  • El collar: Nunca utilizaremos un collar de pinchos o similares, que le provoquen daño o stress porque lo único que estaremos generando en nuestra mascota, es tensión, nervios y agresividad. Recordad que los perros aprenden por asociación, si la respuesta  es negativa  que es la consecuencia de estos collares, nuestro perro vivirá en un continuo estado de nervios y miedo.
  • Estimulación mental. Salir al exterior supone encontrarse con numerosos estímulos olfativos, visuales, táctiles y mentales. Si las salidas son rápidas y enseguida queremos volver a casa, estaremos generando en nuestro perro una fuente de estrés, los paseos son para disfrutar no para que sean una actividad contra reloj como el resto de tareas de nuestro día.
  • Ejercicio: La cantidad de ejercicio va a depender de la raza, pero no consiste en llegar al parque y estar una hora lanzándole la pelota, es mucha más saludable e interesante ir al campo dar un paseo y permitirle quemar energía, porque el decide correr, parar, saltar venir, volver a irse. Mientras que correr detrás de una pelota es una actividad monótona, es mucho más productivo relacionarse con otros perros y que juegue con ellos.
  • Duración y frecuencia. Va a depender de la edad de nuestro perro. Si es un cachorro tendremos que sacarles más a menudo para cubrir sus necesidades fisiológicas en tiempos cortos, porque mucho tiempo en la calle se agotan. Si nuestra mascota es adolescente, saldremos tres veces al día y una de ellas será con más duración que las otras dos. En la etapa adulta tres veces al día con misma duración unos 20 minutos.
  • Instrucciones. En muchas ocasiones cuando vamos con nuestro perro, le damos una cantidad de órdenes seguidas que no cumple con ninguna porque no le da tiempo. Hay que darle una orden formulándola con pocas palabras, y de forma clara.

Por último hay que tener en cuenta que el paseo es el momento de ocio para nuestro perro y para nosotros que le acompañamos, convertirlo en un momento de tensión puede ser muy fácil, si vamos agobiados, estresados, o por la información que transmitimos mediante la correa, o nuestro lenguaje postural es de tensión terminará realizando ese aprendizaje y será de todo el paseo menos divertido para nuestro perro.

Llamando a nuestro perro

Es frecuente que cuando salimos a pasear al campo o al parque veamos a personas paseando con sus mascotas, pero es curioso que muchos de estos individuos no se atreven a dejarles sueltos por miedo a que sus perros no vuelvan, algo que no es muy adecuado para el bienestar del can, ya que corretear suelto, le permite relacionarse con otros perros, correr, jugar, olisquear… lo que es muy positivo para su bienestar físico y mental.

¿Pero porqué nuestro perro no acude a la llamada?

Existen diferentes razones por las que nuestra mascota no acude cuando la llamamos. La principal suele ser la falta de vínculo con él, bien porque no dedicamos tiempo a relacionarnos o jugar con él, o porque tiene asumido que cada vez que se acerca a nosotros/as le regañamos y nos tiene asociado a algo negativo, por lo que nuestro perro no va a dejar de hacer cosas que le gustan por venir con nosotros/as cuando el estímulo que le estamos mandando es negativo.

Otra razón de no acudir a la llamada, es porque no la tienen interiorizada, para lo cual, es necesario enseñarle que cuando pronunciamos una palabra el tiene que dejar de jugar, relacionarse con otros perro, olisquear… y acudir donde nos encontramos.

¿Cómo realizar ese aprendizaje?

Lo primero que debemos de tener presente al iniciar este aprendizaje es que debe de ser progresivo, comenzaremos en casa para más tarde pasar a espacios abiertos como la calle, el parque, el campo…

Debemos establecer una palabra que al perro le sirva de consigna y la asocie a que tiene que acudir, es decir, que la vincule a la llamada. Para ello podemos utilizar palabras como “aquí”, “ahora”. Es necesario no utilizar palabras que estén muy presentes en nuestro vocabulario habitual como “ven” porque le podemos confundir.

Una vez establecida la palabra de consigna, iniciaremos el aprendizaje en una habitación donde no haya estímulos externos como la televisión u otras personas. Cuando acuda al “aquí” le premiaremos con una golosina perruna, cuando lo consigan iremos haciendo más compleja la llamada, por ejemplo añadiendo estímulos o llamándole desde otra habitación de la casa, siempre reforzando positivamente el comportamiento para afianzarlo.

Una vez conseguido en el hogar pasaremos a realizarlo en un lugar al aire libre que no esté transitado. El aprendizaje aquí será como retroceder un poco porque es un espacio nuevo, pero serán más rápidos los avances. Para ello, al principio le colocaremos una correa de 5 metros o más, cuando haya adquirido el aprendizaje y estemos seguros de nuestro perro, le soltaremos.

Hay que recordar que siempre hay que reforzar la conducta de nuestro perro de forma positiva, al principio le daremos comida o golosinas y luego pasaremos al reforzamiento social. Todo se aprende y se consolida si el estímulo que nos ofrecen es el adecuado.

La importancia del ejercicio en los perros

Para aquellos que tienen la suerte de compartir la vida con un perro es evidente la importancia que el ejercicio tiene para su compañero. Dependiendo de las razas se conformarán con un simple paseo o necesitarán salir al campo a correr más libremente y quemar todas esas energías sobrantes.

Por lo general las razas pequeñas no necesitan de demasiado ejercicio y con sacarlos a pasear un ratito mientras hacen sus cosas les llega. Sobre todo porque también pueden corretear por casa y cualquier espacio pequeño es suficiente para que se muevan con cierta soltura.

Por el contrario las razas grandes si suelen necesitar hacer mucho ejercicio. Especialmente perros de raza de caza, pastores, o razas que precisan de mucha actividad, como los Husky o los Pitbull.

La falta de ejercicio causa problemas físicos

Un perro que no realiza el suficiente ejercicio físico tendrá problemas físicos. Para empezar sufrirá de sobrepeso, lo cual puede causarle enfermedades adicionales de articulaciones, diabetes etc. Pero para nuestros compañeros de cuatro patas el ejercicio es fundamental no sólo a nivel físico.

Mentalmente el juego contribuye al correcto desarrollo de su inteligencia. Jugar al aire libre mientras realiza ejercicio físico contribuirá a que el perro mejore su socialización y explore olores y reciba estímulos nuevos.

El no realizar ejercicio puede hacer que acumule energía que de algún modo querrá quemar y posiblemente, sino puede canalizar de la forma correcta esa energía, acabará por desarrollar problemas de comportamiento, romper cosas en la casa o estar en un constante estado de nerviosismo nada positivo para el ni para los humanos que tienen que convivir con el animal.

Combina ejercicio con juego

Muchos perros de por si harán ejercicio y correrán como locos cuando sueltes su correa en el campo. Pero otros necesitarán estimulación mediante el juego. Lanzarles un palo o una pelota suele despertar los instintos de cualquier raza, pero habrá animales que necesites de estímulos más personales.

Con este tipo de mascota tendrás que poner a prueba toda tu paciencia y tus recursos hasta que encuentres eso que hace que por fin se levante y quiera saltar y correr. Generalmente no es necesario gastar mucho dinero en caros juguetes, es cuestión de imaginación y de implicarte en el juego con tu mascota.

Disfruta del tiempo que pasas con tu perro y no solo estará mas saludable y equilibrado, sino que potenciarás vuestra especial relación y tu mejor amigo y tu podréis estar mucho más unidos.

Emociones en los animales

Durante muchos años se ha investigado sí los animales tienes sentimientos y emociones, es decir, si es posible decir que un perro, un gato  o cualquier otro animal se le puede catalogar de triste sin caer en la trampa de estar humanizándoles. En los años 60 muchos investigadores decían que eso era imposible que los animales eran eso animales y por ello no podían sentir, pero un pequeño grupo de científicos avanzados para su época y muy críticados por los de su profesión decidieron investigar con la premisa que nosotros también somos animales, nos diferencia que somos animales-humanos pero ante todo animales si compartimos esa característica porque no van a sentir.

Después de muchos años de investigación se llego a la conclusión de que era cierto que los animales sienten y lo expresan a su manera igual que nosotros lo hacemos a la nuestra. Un ejemplo de que los animales sienten y son mucho más solidarios que los humanos lo vive hace unos años en el zoo en el que trabaje, allí en la zona de herbívoros había un Ñu, un Wallaby y su cría y muchas avestruces. Las avestruces atacaban a la cría pero el Ñu a pesar de no ser padre y ni siquiera pertenecer a la misma especie la adopto como su propia cría y la defendía de los picotazos de la avestruces.

El reino animal nos puede dar muchos ejemplos de como pueden sentir compasión, tristeza, alegría, felicidad e incluso amor. Pero los animales humanos nos empeñamos cuando nos interesa decidimos que solo son animales, esta justificación la suelen hacer las personas que dañan a los animales cortándoles las orejas, quemándoles o cuando les abandona en medio de la nada para que mueran de hambre y sed. Gracias a Dios existen protectoras y refugios donde se da cobijo a aquellos seres que lo han dado todo por sus compañeros de viaje humanos pero que éstos no han sabido estar a la altura.

¿Cómo es posible que haya gente que pueda hacerles daño? En vez de investigar si los animales tienen sentimientos o no, los científicos deberían de preguntarse que es lo que provoca que una persona pueda dañar a su mascota sin ningún tipo remordimiento. Es mucho más noble que sí te has cansado de tu mascota, no te puedes hacer cargo de ella o cualquier otra idea que se le pase por la cabeza al humano, que lo lleve a la protectora antes de dañarlo o abandonarlo a su suerte.

España es uno de los países donde más abandono de animales hay, ellos tienen sentimiento, que tal si adoptamos el lema no hagas lo que no te gustaría que te hicieran a ti.

 

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